miércoles, 15 de marzo de 2017

Guía básica de supervivencia para el turno de noche

El turno de noche. Ay...el turno de noche. Posiblemente la peor parte de nuestro trabajo y también para la que menos se nos prepara. Recuerdo que como en las prácticas universitarias no se hacen noches (craso error, por cierto) llegué al primer turno de alterne sin tener ni puta idea de lo que me esperaba. A día de hoy sigo llevándolas mal, aún así en lo poco que llevo trabajando he ido quitando truquillos de unos y otros que ayudan a sobrellevarlas un pelín mejor. Libreta y boli:

1. Duerme bien: sí, vengo aquí a descubrir la pólvora, qué pasa? Ahora en serio, si el día siguiente trabajas de noche hay 2 buenas tácticas: puedes acostarte tarde el día anterior y dormir hasta la 1 o las 2 de la tarde para ir fresco, o mi preferida, levantarte a una hora de persona normal, aprovechar la mañana y dormir una siesta larga. Cualquiera de las dos repone.

2. Cena ligero: no es aconsejable ir de noche con el estómago a rebosar, se trata de concentrar la sangre en la cabeza y no en la panza. Este punto combina perfectamente con los puntos 3 y 4.

3. Cenad en el trabajo: pedid chino, sushi, unas pizzas o llevadlo de casa. Parece una chorrada pero el hecho de desconectar por 20 o 25 minutos para comer algo refresca muchísimo y anima el resto de la noche. Esto obviamente depende del sitio en el que se trabaje y de las horas a las que se pueda tener tiempo, si es que se tiene. Además combina con el punto 4.

4. Las noches no son para dietas: bastante tienes con pringar de noche y no poder dormir como para tomarte una manzanita y una infusión. Dale a tu cuerpo y sobre todo a tu cerebro un premio por sacrificarlo así, te lo agradecerá. Recomiendo toneladas de chocolate o gominolas, aunque hay quien prefiere salados (palomitas, patatas fritas,pipas...). El caso es la gochada, lo cerdo, lo que hace sentir mal, le mierdé.


5. No abuses del café: como estimulante funciona hasta cierto punto, pero todo tiene un límite. El cuerpo no necesita cafeína, sino glucosa y agua (véase punto 6).De noche no más de 1 café (como muchísimo 2). Las 12 o la 1 es una buena hora. Si abusas del café acabarás dificultando el sueño posterior y estarás más cansado.



6. Botellita de agua: la hidratación es importantísima para reducir el cansancio y mantener la energía física y mental. Imagino que tendréis fuente de agua, compraos una botella libre de PBA que se pueda rellenar y a empinar. Que os siga como un hijo.



7. Retorno venoso: en periodos de descanso poner las piernas en alto disminuye considerablemente la sobrecarga de miembros inferiores. Si queréis algo más pro, medias de compresión. Porque sí, a veces descalzarse y masajearse un poco los pies equivale a esto:


8. Kindle: al hospital se va a trabajar pero a veces hay momentos en los que no hay movimiento. En esos momentos es mejor tener la cabeza entretenida que el aburrimiento, porque el aburrimiento lleva al sueño y el sueño al lado oscuro de la fuerza, y no queremos eso. Un libro electrónico es facilmente transportable, puede almacenar miles de libros, posee una duración de batería de un mes y no daña la vista, teniendo incluso luz para leer con baja iluminación. Imprescindible. También valen series,pelis,consolas, podcasts...pero para mí nada como el Kindle. Entretiene sin quitar la mente del curro.


9. El saliente es un día libre: piensa así y aprovéchalo, sácale partido. Duerme hasta las 2-2:30 y haz planes por la tarde. Es una motivación extra trabajar de noche sabiendo que el día siguiente hay cosas guays que hacer. No te tires la semana de noches vegetando.

Turnos hay miles y seguramente la mayoría de noches no se pueda hacer todo. Habrá noches en que no nos podamos sentar, comer y no digamos leer un libro, noches de trabajo y agobio extremo en la que os acordaréis de este post y pensaréis en el gilipollas que dice que hay que tener las piernas en alto cuando he terminado la medicación de las 24 y ya tengo que empezar con la de las 4.
Yo mismo  me cagaré en todo la próxima noche liada, me atiborraré de café y el día siguiente dormiré hasta que no recuerde el día que es. Pero eh, no me lo tengáis en cuenta.





PD: sigo admirando a las/los que trabajáis y tenéis hijos. Salir de una noche jodida, dar el desayuno a los críos, llevarlos al cole, hacer las tareas de casa y ya si tal, dormir, me resulta encomiable. Quizá yo algún día.


PD2: Este blog no se responsabiliza del consumo indiscriminado de dulces y alimentos ricos en calorías, ni de los más que probables problemas de salud y orondez causados por su consumo.

lunes, 13 de marzo de 2017

Si yo te contara....

Es bastante frecuente en mi vida, y supongo que en la de cualquiera de vosotros, tener conversaciones sobre el hospital con gente que no sabe cómo funciona, que sólo ve la cara externa y extrae su opinión de esa pequeña parte. Los comentarios de la gente suelen ser negativos, sobre todo si su experiencia se basa en pasos por urgencias o centros de salud, que es lo que más conocen. Véase:

- Pues el otro día me encontraba fatal, fui al médico de cabecera y se lavó las manos, me derivó a Urgencias. Allí estuve 3 horas para que me atendieran, me cogieron una vía y para que viniera el médico estuve otras 3 horas. Cuando me valoró me dijo que no tenía nada, que Paracetamol y para casa. Menudo desastre.

Ante este tipo de frases, nuestra respuesta suele ser algo como:
- Si yo te contara....



"Si yo te contara..." 

Y bien, por qué no contarlo? Por qué no decir las cosas como son? Por qué no intentar abrir un poco los ojos de la gente que te rodea, para que sean realmente conscientes de la situación que se vive dentro de un hospital, y de las causas de la misma?
Yo propongo cambiar los "Si yo te contara..." por un "Deberías saber".
Deberías saber que la gente que nos gobierna, probablemente gente a la que hayas votado (mera estadística), está intentando eliminar la Sanidad pública utilizando un truco más viejo que el hambre: disminuir la calidad en todos sus apartados para que se hunda por sí misma. Día a día, en todos los hospitales públicos de España los trabajadores sanitarios llevan a cabo una lucha contra estos gerifaltes trajeados, peleando como pueden por cada derecho fundamental que éstos intentan arrebatar, pero es inevitable que la calidad asistencial se vea perjudicada.

Deberías saber que la comida que te sirven, la televisión que ves, y la limpieza que recibes cuando estás hospitalizado proviene de empresas que buscan beneficio económico, no el tuyo. Que en algunos casos incluso los profesionales que te atienden son gestionados por empresas privadas, disminuyendo así la atención prestada.

Deberías saber que a los enfermeros/as se nos obliga a trabajar cada día bajo presión, haciéndonos cargo de un número ilegal de pacientes, con una cantidad de trabajo por momentos desorbitada y sin tiempo para descansar.  
Por supuesto deberías saber que muchos de nosotros trabajamos a contratos de un día, día a día. Que cada uno es en una unidad diferente, con pacientes que requieren cuidados muy diferentes y a veces sin nadie que nos eche una mano. Que nos llaman a la hora que sea y nos obligan a hacer las 7 horas de rigor, aunque termines a las 23:30 de la noche. Que cogerse una baja es empresa difícil y que nos las descuentan del sueldo (cómo osas estar enfermo?).
Deberías saber que cuando alguien puede "asumir" más trabajo según la ley, lo asumirá. Que a la mínima que tengas un día tranquilo sonará el teléfono y un supervisor te buscará un lugar en el que "necesiten una mano". Cómo vamos a contratar a alguien, con la barbaridad que cobra un enfermero por día?
 Le dará igual que no tengas experiencia en esa unidad, que sean bebés, niños, adultos o mayores. Y qué si tienes que cargar nutriciones en una campana de flujo, canalizar vías a bebés o asistir en un quirófano de traumatología? No se supone que has estudiado para eso?
Sabed también que aunque les digas que no tienes experiencia les dará exactamente igual, te soltarán la siempre mítica frase de :

"Bueno mujer, tienes compañeras que te echan una mano"

Deberías saber que  hay gente cobrando un plus por limitar contrataciones. Que los que una vez fueron tus compañeros se apañan como puedan para llevarse un  pellizquito, aunque sea a costa de tu sufrimiento.


Deberías saber que se nos obliga a trabajar con material de ínfima calidad: los guantes son permeables y se desintegran nada más quitarlos de la caja, los abbocaths se rompen, las máquinas de rayos están viejas, que no hay almohadas, que se reutilizan las sábanas de pacientes que llegan de la privada, que nos restringen las soluciones cutáneas como el Cavilon o el Corpitol (a pesar de lo bien que funcionan), que los "colchones buenos" no se le ponen a todo el mundo, que las mascarillas con filtro especial requieren que hagas una petición formal al gobierno y a la ONU...
Sabéis que no nos dan uniformes? Se ve que están fabricados con piel de tigre de las nieves y no se puede asumir que tengas más de uno. Tampoco nos dan zuecos, pero si tienes un accidente laboral y no los llevas puestos....ahh sorpresa!
Sabéis que en las plantas los termómetros están bajo llave en los despachos de las supervisoras, y si vas a cubrir días tiene que venir seguridad a dártelo para poder trabajar? Que en urgencias no hay glucómetro, y si no te compras uno con tu sueldo no puedes medir glucemias? Pues sabedlo.
Sabed que tenemos que aguantar los brazos de los respiradores con cinta, porque se caen. Que el esparadrapo ahora mismo sujeta el 10% del hospital.
Deberíais saber que lo que os dicen de que "no hay dinero" es mentira. Sí lo hay, trabajando allí lo ves. Lo que pasa es que invertirlo en un cacharro de millones de euros sale en la prensa, pero tener un ratio enfermeros/pacientes acorde a la unión europea no.



Y por último, deberías saber que la culpa también es nuestra, no siempre del sistema.  Hay gente vaga, gente que no quiere trabajar, déspotas e irresponsables. Por suerte, por lo que he podido experimentar, son la inmensa minoría.
En España tenemos unos profesionales fabulosos: auxiliares de enfermería, celadores, médicos, enfermeros, técnicos de rayos y laboratorio...que se esfuerzan muchísimo porque esto siga adelante. Pero necesitamos ayuda. Necesitamos que cuando nos manifestemos por algo se nos arrime el hombro, que cada vez que los de arriba den un paso hacia la privatización todos nos opongamos, y que cuando te tires toda la tarde en urgencias sepas diferenciar un mal profesional de un profesional que no da abasto.